¿Recuerdas el meme de que preguntar a ChatGPT agota medio vaso de agua? Yo también me reí… hasta que vi los datos. Como publicista que vive rodeado de briefings, contrabriefings y tecnología, esta tendencia me tiene en vilo. ¿La Inteligencia Artificial es realmente una bestia insaciable de recursos o hay más mito que realidad? Hoy, te traigo la respuesta; con ejemplos cotidianos y estrategias prácticas que pueden ayudarte a tomar mejores decisiones para tu marca y tu planeta. Ah, y no te pierdas el episodio de nuestro podcast El Mecanismo, donde debatimos este tema con expertos en IA y sostenibilidad.
TL;DR: ¿Usar IA en marketing digital está acabando con los recursos naturales? Ni tanto… ni tan poco. Aquí te lo explico con datos reales, analogías sorprendentes y claves para una publicidad sostenible con IA.
Impacto ambiental de la IA en el mundo real: Cifras y comparativas inesperadas
Cuando hablamos del impacto ambiental de la Inteligencia Artificial, las cifras pueden parecer de ciencia ficción. Los centros de datos que alimentan la IA, como Colossus de X.AI (Elon Musk) y el proyecto Stargate en Texas, están alcanzando consumos energéticos comparables al de ciudades enteras. Por ejemplo, Colossus en su primera fase consume 150 MW, suficiente para abastecer a unas 450,000 viviendas en España. Si se expande a 300 MW, podría llegar a 900,000 familias. Stargate, por su parte, ha solicitado 5 GW, lo que equivale al 20% del consumo eléctrico de todo un país como España.
Pero no solo es consumo energético. El consumo de agua también es impresionante: Colossus utiliza 4 millones de litros diarios para enfriar sus chips. Y según estimaciones, el consumo global de agua de la IA podría alcanzar los 6 millones de metros cúbicos anuales para 2027. Como bien señala un experto:
“El problema no es solo el agua que necesitan estas fábricas para enfriar los chips. Lo más grave es que la IA está consumiendo tanta electricidad que nuestra red eléctrica actual no servirá.”
Esto genera una presión enorme en regiones donde el agua es escasa y las redes eléctricas ya están al límite. De hecho, en algunos estados de EE.UU., los centros de datos representan más del 20% del consumo eléctrico local, y en Irlanda, más del 33%. Research shows que la IA no solo consume recursos, sino que los concentra en ciertas regiones, agravando problemas ambientales existentes.
¿Cuánto consume la IA comparado con tus actividades diarias?
Ahora, ¿cómo se traduce esto a nivel individual? ¿Deberíamos sentirnos culpables cada vez que hacemos una consulta a ChatGPT? Para ponerlo en perspectiva:
- Una sola consulta a ChatGPT consume entre 0,3 y 3 Wh de electricidad, similar a mantener una bombilla LED encendida entre 2 y 20 minutos.
- En cuanto al agua, una consulta equivale a 1,5 ml, menos que media cucharada de té.
Comparando con actividades cotidianas:
- Una ducha de 5 minutos usa entre 50 y 100 litros de agua, lo que equivale a 10,000-20,000 consultas a ChatGPT.
- Preparar una taza de café (0,1 kWh) equivale a 333 consultas.
- Producir una hamburguesa requiere 2,500 litros de agua, similar a 500,000 consultas.
- Ver una hora de Netflix consume 0,3 kWh, equivalente a 667 consultas.
Estas comparaciones muestran que, aunque la IA tiene un impacto ambiental considerable a gran escala, el consumo individual de recursos por consulta es mucho menor que el de muchas actividades cotidianas. Sin embargo, la suma de millones de usuarios y la concentración de centros de datos en ciertas regiones pueden agravar problemas de consumo energético y agua donde ya existen tensiones.

¿La IA amenaza la sostenibilidad ambiental? Desafíos, tendencias y oportunidades
Cuando hablamos de sostenibilidad ambiental y desarrollo sostenible, la inteligencia artificial (IA) suele aparecer como una herramienta revolucionaria. Sin embargo, detrás de su potencial, existen desafíos ambientales que no podemos ignorar. El impacto ambiental de la IA está en el centro del debate actual, especialmente por el consumo energético, el uso de agua y la generación de residuos electrónicos.
Residuos electrónicos, dependencia de minerales y emisiones: el lado menos glamuroso de la IA
Los centros de datos que alimentan la IA, como el reciente Colossus de XAI, son auténticos gigantes. Este centro alberga más de 200,000 GPUs Nvidia H100 y planea llegar al millón en 2025. Para funcionar, Colossus necesita 150 MW de potencia eléctrica continua, lo que equivale al consumo de 150,000 hogares estadounidenses, o 450,000 hogares en España. Y cuando alcance los 300 MW, será como alimentar a 900,000 familias. El calor generado por estos chips es tan intenso que se requieren millones de litros de agua diarios para refrigerarlos. Solo Colossus podría consumir hasta 4 millones de litros de agua al día, el equivalente a llenar 20 piscinas olímpicas.
Este no es un caso aislado. Proyectos como Stargate en Texas planean consumir hasta 1,2 GW, solicitando a las eléctricas 5 GW, lo que representa el 20% del consumo eléctrico de España. Según la Agencia Internacional de Energía, en 2024 los centros de datos consumieron 415 TWh, el 1,5% del consumo global, y se espera que esta cifra se duplique para 2030, en gran parte por la IA generativa.
¿Puede la IA ser ecoaliada? De optimizar energías renovables a medir su propia huella
A pesar de estos desafíos, la IA también puede ser parte de la solución. Research shows que la IA ayuda a estabilizar redes eléctricas, optimizar el uso de energías renovables y mejorar la eficiencia energética en industrias clave. Algoritmos avanzados permiten predecir la demanda energética y ajustar la producción de fuentes renovables, minimizando el desperdicio y reduciendo las emisiones de gases.
Además, la IA puede medir y reducir su propia huella ambiental. El PNUMA recomienda establecer estándares para medir y divulgar el impacto ambiental de productos basados en IA. Grandes tecnológicas como Google, Microsoft y Amazon ya reportan incrementos en su consumo de agua, pero también exploran soluciones como plantas de tratamiento y refrigeración más eficiente.
Propuestas del sector: más transparencia, regulaciones y enfoque sostenible
Frente a este panorama, existen llamados claros a una mayor transparencia ambiental y responsabilidad corporativa. La industria tecnológica está bajo presión para informar sobre su consumo de recursos y buscar alternativas más sostenibles. El desarrollo de algoritmos más eficientes y el control de recursos son pasos clave para reducir la huella de la IA.
"La inteligencia artificial (IA) es crucial para la sostenibilidad ambiental en 2025, ayudando a optimizar procesos y predecir escenarios futuros para mejorar la eficiencia energética y mitigar el cambio climático."


¿Me debo preocupar al usar IA en mi día a día? Perspectiva personal y consejos prácticos para briefings publicitarios 'IA-First'
La Inteligencia Artificial está en boca de todos. Últimamente, escucho mucho sobre el impacto ambiental de la IA, especialmente en términos de consumo de energía y agua. Es fácil sentir cierta culpa cuando usamos herramientas como ChatGPT, sobre todo si pensamos en titulares alarmistas sobre millones de litros de agua y teravatios hora de electricidad. Pero, ¿qué significa realmente una consulta a ChatGPT en métricas ambientales actuales? ¿Deberíamos preocuparnos tanto en nuestro día a día, sobre todo si trabajamos en marketing digital y automatización publicitaria?
De la culpa al criterio: ¿cuánto consume realmente una consulta de IA?
Primero, es clave diferenciar entre el entrenamiento de modelos de IA y la inferencia (el uso diario, como cuando haces una pregunta a ChatGPT). El entrenamiento sí consume mucha energía y agua, pero es un proceso único. La inferencia, que representa entre el 60% y el 90% del consumo total de IA, es lo que hacemos cada vez que interactuamos con estos sistemas.
Hoy, una consulta a ChatGPT consume unos 0,3 Wh y 1,5 ml de agua. Para ponerlo en contexto, es menos que mantener encendida una bombilla LED durante unos minutos y mucho menos que medio vaso de agua. Hace dos años, una consulta equivalía a 10 búsquedas en Google, pero ahora consumen igual:
"Hace 2 años era verdad que una consulta HRGPT equivalía a 10 búsquedas en Google, pero ahora consumen igual."
Actividad | Consumo Energía | Consumo Agua | Equivalente en consultas GPT |
---|---|---|---|
Consulta ChatGPT (2023) | 3 Wh | ~5 ml | 1 |
Consulta ChatGPT (actual) | 0,3 Wh | 1,5 ml | 1 |
300 consultas ChatGPT | 90 Wh | 0,5 L | 300 |
Uso laptop (8h) | 0,4-0,8 kWh | - | 1,350-2,650 |
Automatización publicitaria y eficiencia energética en campañas
La automatización publicitaria y la personalización IA no solo mejoran la eficiencia energética, sino que también ahorran recursos en campañas bien gestionadas. Integrar la IA en la gestión de briefings permite definir objetivos y métricas ambientales desde el principio, optimizando el uso de recursos y reduciendo la huella ecológica.
Por ejemplo, automatizar tareas repetitivas y personalizar mensajes con IA evita desperdicio de tiempo y energía. Un briefing bien planteado, con criterios de sostenibilidad, puede marcar la diferencia en el impacto ambiental de una campaña.
El papel de una agencia IA-First y el ecosistema EfectoVisual
Trabajar con una agencia IA-First como EfectoVisual ayuda a reducir la huella en marketing digital de forma medible. Su ecosistema combina consultoría, automatización y casos de éxito en reducción de impacto ecológico. Además, en nuestro podcast El Mecanismo abordamos cómo pasar de mitos a datos en IA y sostenibilidad publicitaria.
Aunque la ansiedad ambiental por la IA es real, los datos comparativos muestran que una consulta bien empleada, especialmente dentro de un briefing estratégico para campañas de alto impacto, consume mucho menos que las acciones cotidianas. Aprovechar la Inteligencia Artificial de forma responsable es posible y, de hecho, recomendable para lograr campañas más sostenibles y eficientes.
Preguntas frecuentes sobre IA, sostenibilidad e innovación publicitaria (FAQ)
En el día a día, surgen muchas dudas sobre el impacto ambiental de la IA y cómo afecta a quienes trabajamos en marketing, creatividad y comunicación. Estas preguntas no son solo técnicas; reflejan preocupaciones reales de equipos y clientes que buscan equilibrar innovación y sostenibilidad. Aquí intento responder las más habituales, basándome en datos recientes y en la experiencia directa con proyectos de automatización publicitaria y agencias IA-First como EfectoVisual.
¿Debo restringir mi uso de ChatGPT por temas ambientales? La respuesta corta es: no necesitas sentirte culpable por cada consulta a ChatGPT. Es cierto que la IA consume recursos, pero la mayor parte del gasto energético y de agua ocurre durante el entrenamiento inicial del modelo, un proceso que solo se realiza una vez. El uso diario (la inferencia), que es cuando tú haces preguntas, es mucho más eficiente. Por ejemplo, una consulta típica hoy consume apenas 0,3 Wh de electricidad y alrededor de 1,5 ml de agua, según estudios recientes. Para ponerlo en contexto, eso es menos que dejar una bombilla LED encendida unos minutos o una fracción del agua que usas al preparar un café. Así que, salvo que hagas miles de consultas al día, tu huella es mínima.
¿Es más contaminante buscar en Google o pedir una imagen por IA? Hasta hace poco, pedir algo a ChatGPT podía consumir hasta diez veces más energía que una búsqueda en Google. Sin embargo, los avances en eficiencia han igualado ambos procesos. Hoy, una consulta a ChatGPT o una búsqueda en Google tienen un impacto ambiental muy similar. Eso sí, generar imágenes o vídeos con IA sigue siendo más costoso energéticamente que el texto, pero la diferencia se está reduciendo con cada nueva generación de modelos.
¿Cómo puedo integrar la IA en mi estrategia de marketing sin aumentar mi huella? La clave está en la automatización publicitaria inteligente y en la elección de herramientas optimizadas. Prioriza modelos y servicios que reporten mejoras en eficiencia y transparencia sobre su consumo energético. Además, utiliza la IA para tareas que realmente aporten valor, como la personalización de campañas o el análisis predictivo, evitando el uso excesivo o innecesario. Recuerda que la IA también puede ayudarte a optimizar recursos, reducir el desperdicio y mejorar la segmentación, lo que a la larga compensa su consumo inicial.
¿Ayuda de verdad una agencia IA-First como EfectoVisual? Sí, y no solo por la tecnología. Una agencia especializada como EfectoVisual entiende cómo equilibrar innovación y sostenibilidad, ayudando a sus clientes a medir y reducir el impacto ambiental IA en cada campaña. Además, pueden asesorarte sobre métricas reales, pasos concretos para una transición sostenible y cómo comunicar estos avances a tu audiencia, mejorando tanto el retorno de inversión como la reputación ambiental de tu marca.
En conclusión, resolver dudas prácticas sobre IA y sostenibilidad no solo facilita la acción inmediata, sino que también mejora la percepción y el impacto de tus campañas. La clave está en informarse, comparar y tomar decisiones conscientes, sin caer en alarmismos ni en la inacción. La IA es una herramienta poderosa para la innovación sostenible, siempre que se use con criterio y responsabilidad.